Nos alojamos en un hotel increíblemente divertido. Visitamos el impresionante casco antiguo con su historia fascinante y el animado barrio de Rotermann con sus bares y tiendas geniales. ¡Fue una experiencia épica llena de risas y aventuras! Definitivamente repetiremos.

Si solo hubiera habido una discoteca o club nocturno cerca, habría sido la escapada perfecta para jóvenes fiesteros como nosotros. Faltó un poco de diversión nocturna para completar nuestra experiencia en Tallin.

Me encantó la decoración del hotel, con un estilo clásico y elegante que me hizo sentir muy cómoda. Los espacios comunes estaban bien cuidados y adornados con flores frescas, lo que le daba un toque acogedor. Además, el hotel era muy accesible para personas mayores, con rampas y pasillos amplios que facilitaban el desplazamiento con facilidad.

Me hubiera gustado que el personal del hotel fuera un poco más atento y considerado con los huéspedes mayores. A veces, me sentía un poco desatendida y creo que podrían haber sido más amables y serviciales.

La habitación está bien equipada y el desayuno es variado. La recepción está abierta las 24 horas y el parking funciona correctamente. Además, tienen sauna disponible por un cargo adicional hasta las 23:30.

Me sentí muy a gusto y libre de pedir cualquier tipo de ayuda, no tengo ninguna queja en absoluto.

Me ha encantado estar allí, el lugar es bien organizado y maravilloso.

los muebles de madera y el baño propio eran geniales y la habitación tenía una caja fuerte, una plancha y tabla de planchar, una mesa de trabajo. desayunos bastante buenos con panecillos calientes y yogur y queso ofrecidos por un personal bueno.

Las habitaciones con camas individuales y con un baño🙂

El wifi era lento.

La relación calidad/precio del hotel es excelente. Las habitaciones son confortables y limpias, y el desayuno incluido en el precio está bastante bien. La ubicación del hotel también es conveniente, ya que está relativamente cerca del centro de la ciudad.

Me encantó la decoración del hotel, con un estilo clásico y acogedor. Las áreas comunes estaban muy bien cuidadas y eran perfectas para relajarse y disfrutar de un buen libro. Además, el hotel era muy accesible para personas mayores, con rampas y ascensores para facilitar el movimiento.

Me hubiera gustado que el personal fuera un poco más atento y considerado con las necesidades de las personas mayores. A veces, me sentí como si estuviera tratando con niños trabajando allí, y me hubiera gustado un trato más profesional y respetuoso.

Las habitaciones climatizadas del Dorell tienen suelos de moqueta y muebles de madera. Me encantó la sensación acogedora que transmitían. Como huésped, esto me hizo sentir como si estuviera en mi propia habitación.

La única cosa que no me gustó tanto fue la moqueta en el suelo. Es solo una cuestión de preferencia personal, ya que entiendo que para otros huéspedes puede ser algo cómodo y acogedor.

Las habitaciones con camas individuales y una ducha y un baño. El desayuno bastante bueno con creps y café. Ubicación estupenda - a un corto paseo de la Universidad de Tallin. Tienen un parking gratis en la propiedad Un personal muy alegre y alegre, un registro rápido...

La habitación era amplia y limpia, con buena presión de agua en la ducha. El desayuno tipo buffet estaba completo y el wifi funcionaba en todo el hotel. Cerca de la terminal de ferrys y a unos 15 minutos a pie del centro histórico.

Me sentí muy afortunado, no tengo ninguna razón para quejarme.

Camas super cómodas, habitaciones enormes. Tiene una ubicación perfecta para visitar el Palacio Kadriorg.

Me encantó la decoración del hotel, especialmente en las áreas comunes. Los salones estaban elegantemente amueblados y me sentí muy cómoda en los sofás acolchados. Además, el hotel era muy accesible para personas mayores. No había escaleras empinadas ni largos pasillos, lo que facilitaba mi movilidad y me permitía disfrutar de mi estancia sin preocupaciones.

La única cosa que me hubiera gustado para unas vacaciones aún mejores para personas mayores es que los empleados fueran un poco más atentos y considerados. Aunque estaban dispuestos a ayudar, a veces parecían ocupados o distraídos.

Precio ajustado, habitación tranquila, desayuno aceptable, trato del personal amable, ubicación cercana al centro y al transporte público.

Nada de nada.

Muy buena relación calidad/precio; habitaciones confortables, con sábanas y toallas. Desayuno sencillo, tipo buffet, incluido en el precio, con horario de 8 a 10 todos los días. Wifi en todo el hotel (tienen varias redes, por lo que se puede elegir la que mejor señal tenga en la habitación). Muy cerca de la terminal d de ferrys (también para en esta terminal el bus del aeropuerto).

A 20 minutos andando del centro (si bien es todo llano). Creo que no tenía ascensor.

El desayuno básico pero correcto. La ubicación del hostal es buena, a 15 min caminando del centro y cerca de una calle principal. Destaco la amabilidad de la recepcionista. Agradezco que el recepcionista me haya conseguido un boiler para prepararme un café/infusión antes del desayuno, ya que tenía que salir temprano. El precio de la habitación con baño propio es bastante bueno, evitando los precios desorbitados de la ciudad en esas fechas. Aunque el lugar en general es sencillo, nos acostumbramos rápidamente y todo lo demás fue bien.

Lo recomiendo.